SENTADA A LA DERECHA DEL PADRE

Hemos venido a hablar de ti, Madre, y contigo, que al aceptar en fe la Palabra del Ángel Gabriel enviado por Dios, Cristo se hizo hombre en tus entrañas de Madre, y por eso, cambias todo. Porque hablamos con LA THEOTÓKOS, la MADRE DE DIOS.

Sentada a la derecha del Padre, completas, la primera, el Amor de la Trinidad Santa, pues desde que tu Hijo te sienta a su derecha, la eterna Trinidad tiene como suya la temporal Humanidad iniciada por Jesús en su Ascensión, y que HOY, Asumida tú por Ángeles en fiesta, inauguras la aplicación a todo creyente.

Gracias, Madre. Ha comenzado el futuro. La eternidad segura se hace realidad.

Por eso, voltean campanas, visten de fiesta personas, pueblos, instituciones; se alegran cuantos humanos salvados por tu Hijo muerto, resucitado, ascendido al cielo, venimos a esta fiesta, y tú la primera firmas el amplio pliego de Testigos, que firmamos contigo: Lo que mi Hijo dice “El que cree en mí, aunque haya muerto vivirá”, ¡¡es VERDAD!!